Quemar las naves (antes de emprender el viaje)
Escuché la expresión quemar las naves en mi primera juventud (estoy viviendo la tercera o la cuarta. Vivir una juventud permanente hace irrelevante llevar la cuenta) en una canción de Víctor Manuel:
”En medio del camino me senté, quemé las naves, me olvidé de pensar y en el vacío nació esta canción para Pilar.
Durante muchos años desconocí su significado hasta que me enteré de la anécdota atribuida a Don Cortés, que según esto no quemó las embarcaciones sino que las hundió; aunque hay una anécdota anterior con Alejandro Magno como protagonista, quien quemó literalmente las naves para obligar a su ejército a ganar la guerra y regresar a casa encaramados en los barcos fenicios.
Yo sospecho que ambas anécdotas son falsas y que fueron creadas simplemente para justificar las tendencias pirómanas de los conquistadores. Parafraseando al Joker de Nowlan: “Hay gente que sólo quiere ver arder las naves”.